«No van a parar hasta que algo me pase»: L-Gante denunció persecución mediática
Elián Valenzuela, conocido artísticamente como L-Gante, denunció en sus redes hostigamiento por parte de los medios de comunicación y los calvarios que vive a causa de ello. “Llegaron demasiado lejos”, aseguró el músico.
“Soy Elián Valenzuela, pero todos me conocen como L-Gante. Tengo 24 años, soy artista y desde hace mucho tiempo me gano la vida a base de música. Siempre lo dije, soy un pibe de barrio que todo lo que logré lo hice desde abajo, rompiéndome el alma, sobreponiéndome a un sinfín de obstáculos, sobre todo el del prejuicio”, escribió en un posteo que publicó en sus historias de Instagram.
“Los años me fueron curtiendo, el odio, la envidia, la crítica clasista y racial sobre mi persona, no hicieron más que fortalecerme. Siempre dije que toda esa mala onda que me tiraban me hacía más fuerte y así fue hasta hoy”, siguió.
El cantante detalló la difícil situación que vive desde el juicio que enfrento, donde fue acusado de; Amenazas, Privación ilegítima de la libertad, Tenencia de armas de fuego, Tenencia simple de estupefacientes, Encubrimiento calificado. Por el cual fue absuelto.
“Nunca voy a bajar los brazos, pero la realidad es que hoy estoy lleno de angustia y dolor. Lograron llevarme a un lugar que nunca imaginé. Creí que el juicio en el que me absolvieron iba a ser un punto de partida, pero me equivoqué. Desde la absolución sólo tienen un propósito: quieren, necesitan verme caer”, expresó.
“¿Quiénes? Parte de los abogados a los que me enfrenté y les gané en Tribunales, mucha prensa que me extorsiona a diario exigiendo que les dé una nota, personas que me piden plata… Todo se volvió un calvario. No paran con los agravios, no dejan de ensuciarme mediáticamente”, aseguró.
Y agregó: “Primero dijeron que estoy involucrado e incluso fotografiado en medio de una investigación por narcotráfico. Mentira, no hay una sola causa donde mi nombre y reputación estén en juego. Tuve que hacer un habeas corpus y recién ahí poder mostrar que mi honor sigue intocable”.
El artista denunció que, a raíz del juicio, él y su familia son perseguidos y hostigados por autos desconocidos que los siguen a todas partes: “Ahora, como se les acabó esa mentira, lejos de parar, inventan una más horrible si es que existe. Convivo con autos raros siguiéndome, mi domicilio, el de mi hija, el de mi pareja, aparecen a diario en los medios, ustedes no van a parar hasta que algo me pase”
“La mediatización y el show televisivo se transformó en persecución. Hasta siento que ya no solo quieren verme preso, tal vez buscan verme muerto o que yo mismo me quite la vida”, afirmó.
Y cerró. “Llegaron demasiado lejos, no creí que serían capaces de tanto. Me equivoqué. Esto preocupa a mi hija, mi pareja, a mis familiares y a todas las personas que me quieren. Les pido por favor que cuiden la salud mental de las personas, así por una vez se ahorran el ridículo que hacen hablando del tema cuando ya es demasiado tarde”.